ABRIL

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1858 Con complicadas diligencias ha logrado que el nuncio permita que tres monjas de la M. París pasen de Cuba a la Península y que el obispo Caixal la acoja en su diócesis; espera de inmediato la autorización civil.

1861 El diputado Figuerola hace duros ataques a Claret en el Congreso a causa de una lámina sobre los condenados en la que alguien puso su nombre. La persecución tiene a Claret algo desconcertado.

1862 Es obispo asistente del nuevo arzobispo de Santiago, D. Calvo y Lope.

NUEVA EXPANSIÓN (1922-1934)

EN REPÚBLICA DOMINICANA

La Diócesis de Santo Domingo se gloría, con toda razón, de ser la Primada de toda América, ya que en ella se celebró por primera vez la Eucaristía cuando el descubrimiento del Nuevo Mundo por Colón. Allí deseaba ir la Congregación, y fue el  año 1923 cuando aceptó dirigir el Seminario diocesano de Santo Tomás de Aquino,  en Santo Domingo. Junto a esa dirección el Arzobispo ofreció también regentar la iglesia adyacente del antiguo convento dominicano y otra parroquia en la que los seis misioneros encargados del Seminario pudieran ejercitar su ministerio. Un encargo muy honroso y de suma responsabilidad el que la Congregación aceptaba, y, como siempre que se trataba de Seminarios, los Superiores no  dudaron  en  poner al frente a misioneros competentes  y de gran espíritu. En 1938 se abrió la fundación de Puerto Plata, y en 1942   la de Altamira. El año 1930 un ciclón arrasó totalmente el Seminario. A otras diversas dificultades aparecidas, hubo que añadir su reconstrucción material con grandes sacrificios. El año 1946 se abandonó el Seminario para asumir la iglesia de Altagracia.

JOSÉ VALL

Compañero de Ordenación (1803-1876)

Alpens (Barcelona, España). Cursó la carrera eclesiástica en el seminario de Vic. Su vida pastoral se desarrolló atendiendo los pueblecitos de la zona. Se ordenó de diácono el 20 de diciembre de 1834, el mismo día que Claret, en la iglesia de la Presentación de las Carmelitas Descalzas, destruida durante la guerra civil española en 1937. La carta de estesacerdote, compañero de ordenación, escrita años después, en 1838, es curiosamente la primera carta que se conserva dirigida a Claret. Decía así: Esta es la primera ocasión que se me ofrece para escribirle, diciéndole que no se puede alegrar de mi ascenso, porque me temo que seadescenso. Pero Dios lo bendiga todo. Nunca más he sabido de mi compañero Mosén Jaime (Balmes?) ni demás; si usted sabe algo, me lo puede decir. Si le sobran misas y sin perjudicar a nadie me puede enviar algunas, pues en esta veo que van muy escasas.

Un misionero fuerte y suave

Yo quedé espantado la primera vez que leí estas palabras de santo Apóstol al ver que a la ciencia sin dulzura, sin mansedumbre, la llama diabólica.

¡Jesús, diabólica!… Sí, diabólica es, y me consta además por la experiencia que el celo amargo es arma de que se vale el diablo, y el sacerdote que trabaja sinmansedumbre sirve al diablo y no a Jesucristo. Si predica, ahuyenta a los oyentes, y, si confiesa, ahuyenta a los penitentes, y,  si se confiesan, lo hacen mal, porque se aturden y se callan los pecados por temor. Muchísimas confesiones generales he oído de penitentes que se habían callado los pecados porque los confesores les habían reprendido ásperamente (Aut 376).

¡Oh Dios mío!, dadme un celo discreto, prudente, a fin de que obre en todaslas cosas… con fortaleza, pero al propio tiempo suavemente, con mansedumbre y con buen modo. En todo espero portarme con una santa prudencia, y al efecto me acordaré que la prudencia es una virtud que nace en el hombre con la razón natural, la instrucción la cultiva, la edad la fortifica, el trato y comunicación con los sabios la aclara y se consuma con la experiencia de los acontecimientos (Aut 383).

PARA LA REFLEXIÓN PERSONAL

  • Tu celo misionero, ¿es discreto y prudente o impulsivo y amargo?
  • ¿Te consta que alguna vez hayas alejado a alguien de la Iglesia o incluso de la fe por un celo mal entendido?
  • ¿Procuras que la mansedumbre informe de amor paciente tu celo misionero?
  • ¿Crees que posees un estilo no violento en tu lenguaje y en tus relaciones con los demás? ¿Qué puedes hacer para mejorar?

“Cuando estamos estrechamente unidos a Dios, no podemos ver a Dios como Él es. Ni siquiera nos vemos a nosotros mismos en esta relación. Es una adhesión que destruye a Dios y a nosotros en la relación” (Paul Coutinho).