FELIPE ROVIRA

  1. FELIPE ROVIRA Y COMAS.

A todos los que las presentes vieren y entendieren hacemos saber, que, por los documentos que nos ha presentado nuestro Secretario de Cámara y Gobierno, el Pbro. D. Felipe Rovira, consta que nació y fue bautizado en la Parroquia de S.  Martín de Centellas, Diócesis de Vich a veinte y siete de Novbre. de mil ochocientos diez y ocho. Estudió la instrucción primaria, tres años de gramática latina y dos de Retórica con los P.P. de la Escuela Pía en el Colegio de Moyá. Habiendo merecido que le diesen la oración retórica en el certamen público, que tuvieron los alumnos en el último año, como el más distinguido de sus condiscípulos. 

Luego estudió y tiene aprobados en el Seminario Conciliar de Vich tres años de Filosofía, el de Lógica y el de Metafí­sica con nota de sobresaliente. Así mismo tiene estudiados y aprobados en el propio Seminario los siete años de Teología, que son los de instituto y los cinco con nota de sobresaliente. 

Previas las Dimisorias del Ordinario recibió en Perpiñan la prima Clerical Tonsurados cuatro menores y el Subdiaconado en las Témporas de la SSma. Trinidad del año 1844; y luego en Julio del mismo año recibió en Roma las demás órdenes hasta el Presbiterado. Vuelto a España el mismo año de su ordenación en 17 de Noviembre del susodicho año por disposición del Muy Ilustre Sr. Gobernador Ecco.  de Vich, pasó a la Parroquia y pueblo de Baleñá con el cargo de Maestro de instrucción pública, que desempeñó por espacio de diez y siete meses continuos, después de los cuales fue destinado de Vicario y maestro también de instrucción pública en el Pueblo de Navarcles, asociándole otro Sacerdote en calidad de pasante para atender a las diferentes secciones que habían de hacerse entre los ciento cuarenta niños que asistían a la escuela, quedando a cargo del Maestro especialmente las clases de Aritmética, gramática castellana y rudimentos de la Latina. Dos años consecutivos desempeñó con aplauso de los Superior­es y del público este cargo, hasta que le nombraron cura Ecónomo de las Parroquias de S. Martín y de S. Pedro de Serrahima contiguas a la Villa de Sallent, cuya cura de almas desempeñó por espacio de veinte y tres meses consecutivos, a satisfacción de los Superiores y feligreses. Durante este tiempo la Reverenda Comunidad de Rector y Pbro de la indicada Villa, le invitaron con una plaza de la misma Comunidad con tal que se hiciese cargo de la escuela de Gramática latina que hay en dicha Villa; y como quiera que las ocupaciones de la cura de almas le permitían lugar suficiente para su desempeño aceptó desde luego ambas cosas y las desempeñó con el mejor acierto dando varios discípulos que hoy están al concluir sus brillantes carreras respectivamente. 

Antonio Claret, natural de Sallent, después de haber tomado in­ formes de aquellos paisanos y amigos suyos le invitó por carta particular para que le acompañase en la misión de su arzobispado en América, y después de haberse consultado aceptó la propuesta, renunciando a la cura de almas y las demás plazas que van mencionadas. Junto con S.E. Illma. se embarcó para América y le ha acompañado hasta la fecha en todas partes sin interrupción. A los dos días de estar en Cuba le nombró su Mayordomo y a las tres semanas le honró ade­más con el nombramiento de Maestro de Colegiales de su seminario y con el de Profesor de perfección de Latín en el mismo establecimiento y de examinador sinodal del Arzobispado. de Cámara y Gobierno, y a veinte y ocho de dicho mes Rector del seminario cuyos cargos desempeñó a satisfacción de su Prelado, hasta Julio del sigte. año de 1852, que habiendo enfermado gravemente su secretario de Cámara, de cuyas resul­tas murió en España en Setbre. de dicho año, le nombró entonces Secretario en propiedad, cuyo destino sigue desempeñando al lado del Prelado. Nombrado Sectg. le acompañó to­das las veces que salió a la visita Pastoral y misión; y por lo mismo le sirvió siempre de Sectg. de Visita, predicando al propio tiempo cuantas veces se lo ordenó, lo mismo que ahora 

Durante el tiempo que estuvo en los varios destinos del Obispado de Vich, predicó constantemente en todos los pueblos, hizo tres cuaresmas enteras y predicó también cuatro años todos los días del mes de Mayo por orden expresa del Prelado. Tiene licencias perpetuas de celebrar, predicar, confesar personas de ambos sexos incluso Religiosas y absolver de re­ servados en su Arzobispado, en el Obispado de la Habana, de Vich, de Barcelona, Teruel. Arzobispado de Toledo, Sevi1la, Valencia y del Patriarca de las Indias. En distintas ocasiones ha sido nombrado por su Prelado Director de Ejercicios espirituales de Monjas y Ordenandos. 

Así mismo atestamos y certificamos que en todo el tiempo que ha estado en nuestra compañía ha tenido siempre una conducta ir­ reprensible, sin faltar jamás al decoro, ni rebajar en lo más mínimo la dignidad de su propio estado; que nos ha sido siempre fiel, tanto en los cargos públicos como en los reservados graves que le hemos confiado, desempeñándolos a nuestra entera satisfacción; que se ha sabido captar el aprecio del público en gral. y en particular de los Sacerdo.es d nuestra Diócesis, manifestando siempre un celo incansable en todas las funciones de su sagrado ministerio, que han merecido nuestro particular aprecio; en testimonio de lo cual le damos las presentes selladas con el mayor de nuestras armas, firmadas de nuestra mano y refrendadas por nuestro Vice-Secretario de Cámara y Gobierno. 

Madrid a ocho de Enero de mil ochocientos cincuenta y ocho. 

Antonio Maria, Arzopo. de Cuba.